Los
Minotauros
El Minotauro (del
griego [Minótauros]) era un monstruo
con cuerpo de hombre y cabeza de toro. Su nombre significa "Toro de Minos",
y era hijo de Pasífae y el Toro de Creta. Fue encerrado en un laberinto
diseñado por el artesano Dédalo, hecho expresamente para retenerlo, ubicado en
la ciudad de Cnosos en la isla de Creta. Por muchos años, siete hombres y otras
siete mujeres eran llevados al laberinto como sacrificio para ser el alimento
de la bestia hasta que la vida de ésta terminó a manos del héroe Teseo (aunque
existen dos versiones conocidas acerca de la frecuencia de este tributo). Según
una historia, las catorce vírgenes eran enviadas anualmente; en cambio, otra
versión dice que los siete muchachos y siete doncellas eran llevados cada nueve
años Los catorce jóvenes eran internados en el laberinto, donde vagaban
perdidos durante días hasta encontrarse con la bestia, sirviéndole de alimento.
El mito tiene su versión más completa en la Biblioteca mitológica de Apolodoro.
Mito del laberinto:
Una cantera abandonada al sur
de la isla griega de Creta y atravesada por una complicada red de túneles
subterráneos podría ser el lugar del mítico laberinto diseñado por Dédalo para
encerrar al Minotauro, una criatura mitológica mitad hombre y mitad toro.
Así lo ha sugerido un equipo de expertos británicos, encabezados por el geógrafo Nicholas Howarth, de la Universidad de Oxford, tras realizar una expedición a la cantera. Hasta ahora se consideraba que el palacio de Cnossos, cuyas ruinas fueron excavadas y reconstruidas a principios del pasado siglo por el arqueólogo Arthur Evans, era el único que podría dado cobijo en la antigüedad al laberinto de la leyenda griega.
Según esta leyenda, el rey Minos mandó construir el laberinto para encerrar allí al minotauro, una bestia feroz nacida de la unión entre su esposa, Parsifae, y un toro del que ella se había enamorado por intervención de Poseidón. Dédalo fue encerrado también, junto a su hijo Ícaro, en el laberinto, pero construyó unas alas para ambos con las que, salvando los muros de la prisión, se remontaron sobre el Mediterráneo.
Las cuevas, que consisten en más de tres kilómetros de túneles con cámaras más anchas y callejones sin salida, han sido visitadas desde tiempos inmemoriales por viajeros en busca del laberinto, pero desde que finales del siglo XIX, fueron abandonadas, e incluso el Ejército nazi las utilizó para almacenar municiones durante la Segunda Guerra Mundial.
Así lo ha sugerido un equipo de expertos británicos, encabezados por el geógrafo Nicholas Howarth, de la Universidad de Oxford, tras realizar una expedición a la cantera. Hasta ahora se consideraba que el palacio de Cnossos, cuyas ruinas fueron excavadas y reconstruidas a principios del pasado siglo por el arqueólogo Arthur Evans, era el único que podría dado cobijo en la antigüedad al laberinto de la leyenda griega.
Según esta leyenda, el rey Minos mandó construir el laberinto para encerrar allí al minotauro, una bestia feroz nacida de la unión entre su esposa, Parsifae, y un toro del que ella se había enamorado por intervención de Poseidón. Dédalo fue encerrado también, junto a su hijo Ícaro, en el laberinto, pero construyó unas alas para ambos con las que, salvando los muros de la prisión, se remontaron sobre el Mediterráneo.
Las cuevas, que consisten en más de tres kilómetros de túneles con cámaras más anchas y callejones sin salida, han sido visitadas desde tiempos inmemoriales por viajeros en busca del laberinto, pero desde que finales del siglo XIX, fueron abandonadas, e incluso el Ejército nazi las utilizó para almacenar municiones durante la Segunda Guerra Mundial.
Bibliografía: http://www.muyhistoria.es/h-antigua/articulo/el-laberinto-del-minotauro
https://es.wikipedia.org/wiki/Minotauro
muy interesante, gracias por compartirnos esta información :)
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